Le Graët anunció antes del torneo que Deschamps decidiría su futuro en base a si alcanzaban las semifinales, por lo que las aspiraciones de Zinedine Zidane de llegar al puesto se verían aplazadas un mínimo de 2 años más. La idea sería modificar las tres estrellas de 1958, 1962 y 1972 (las Copas del Mundo que conquistó Pelé) por tres corazones, en homenaje al «genio», como el propio Domínguez lo denomina.