Tras la final de mañana es posible que en el próximo estudio de mercado haya niñas que también quieran ser futbolistas, aunque los niños no quieran ser profesores. Hay excelentes jugadoras que arropan al equipo que no son del Barça, pero el estilo es inconfundible. La crónica de la gran final del Mundial de mañana no debería ser un artículo reivindicativo ni solamente elogioso.