Japón estuvo muy cerca de dejar una nueva sorpresa histórica en este Mundial de Qatar. Y, tras una prórroga sin goles, la eliminatoria se decidió en la tanda de penaltis. No obstante, en el tramo final del encuentro acabó llegando el gol del honor coreano, obra de Seung-Ho Paik. El portero croata paró tres de los cuatro lanzamientos japoneses (Minamino, Mitoma y Yoshida) y Croacia pudo pasar a los cuartos de final.